El próximo 23 de noviembre cambiarán riendas del partido a través de una encuesta, tal como lo sugirió el propio AMLO, e incluso avalado por el Tribunal Electoral del Poder (TEPJF)

Ciudad de México.-

El Movimiento Regeneración Nacional, o Morena, vive un fenómeno que era bien conocido en el Partido de la Revolución Democrática (PRD): la disputa violenta entre grupos en su interior. Es la guerra de las tribus renacida en el partido de la “esperanza”, que para destrabarse deberá transparentar el padrón de su militancia, el cual está actualizado con fecha de noviembre de 2018.

Aunque reina la desavenencia, la estructura de los profesionales del partido que fundó hace cinco años el presidente Andrés Manuel López Obrador junto con Bertha Luján y otros más tienen claro que la cuenta regresiva ha comenzado para que el próximo 23 de noviembre cambien las riendas de este instituto político a través de una encuesta, tal como lo sugirió el propio AMLO, e incluso avalado por el Tribunal Electoral del Poder (TEPJF), que les ha restregado que en los estatutos de Morena se establece que la militancia puede renovar a sus liderazgos por medio de esta vía de la consulta.

“Urge limpiar el cochinero en que se ha convertido este proceso. Ya huele mal, pero no hay duda de que la fecha para decidir lo que pasará en la dirigencia de Morena es la del 23 de noviembre”, advierten estos profesionales.

Bertha Luján Uranga, una de las aspirantes a dirigir el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) morenista, y en quien recaen casi todos los reclamos de la polarización del proceso, debe buscar el diálogo con la aún presidenta del partido, Yeidckol Polevnsky, con Mario Delgado, líder de los diputados morenistas, con el senador Alejandro Díaz Durán, y con Leonel Godoy, secretario de Organización de este instituto político, para destrabar el conflicto en el proceso de renovación de su próximo líder, señalaron a Crónica fuentes cercanas al movimiento.

“Bertha está muy radicalizada, por eso debe buscar el diálogo con todos. El llamado que hace a través de Facebook no es un llamado a la unidad, sino es para echarle montón a Yeidckol”, precisó la fuente, que pidió el anonimato.

Dijo que aunque están en tiempo para elegir al nuevo dirigente de Morena, lo primero es resolver el tema del padrón y junto con ello lograr un gran acuerdo político, aclaró la fuente, que advierte que Gabriel García, exsecretario de Organización de Morena, les entregó hace apenas dos meses la lista de sus militantes, la cual está muy manoseada, admite.

Precisa que la decisión del Tribunal Electoral de Poder Judicial de la Federación es anular el proceso de elección es porque, precisamente, el padrón “no resulta confiable”, señala la voz consultada, además es por las “miles” de denuncias de los simpatizantes presentadas en todo el país, pero “si no se logra el acuerdo, que sí va a ocurrir, tenemos estos noventa días para ver cómo le hacemos en Morena”, dice el entrevistado, entre el sarcasmo y la advertencia.

La fuente enfatiz que Bertha Luján Uranga debió aceptar desde un principio que el proceso de renovación de la dirigencia fuera por medio de la encuesta, como lo planteó el presidente Andrés Manuel López Obrador y como lo dijo el propio Tribunal Electoral, lo lamentable es que la exfuncionaria del gobierno capitalino cree que tiene un voto muy consolidado.

Respecto a lo que ha dicho Mario Delgado de que hay una “guerrita” contra él, la fuente indica que quiere hacerse “la víctima”, y ahorita lo importante es lograr acuerdos, insistió la fuente.

El viernes por la noche, la exconsejera de Morena difundió un video a través de Facebook en el que llama a los militantes a realizar un asamblea para replantear qué se debe hacer para elegir al nuevo liderazgo del Partido que fundó con López Obrador.

“Es el momento para recordar por qué construimos este movimiento. Es el momento para sacar la casta. No nos rendimos”, dijo en su llamado videograbado.

Bertha Luján es a quien se señala, principalmente, de no escuchar al presidente López Obrador sobre el método para elegir a la nueva presidenta o presidente del paritido. El sondeo favorecería a Polevnsky y al líder de los diputados morenistas, pero como Luján es casi una desconocida fuera de las filas que siguen al jefe del Ejecutivo, entonces no le conviene a ella, aclara el operador político de Morena.

Incluso fue el propio TEPJF el que, con unanimidad de votos, desestimó los lineamientos emitidos por la Comisión de Honor y Justicia del partido —dirigida por Luján Uranga— al opinar que esta comisión “excedió sus facultades, al no contar con atribuciones para posicionar esos lineamientos impugnados, pues constituyen requisitos adicionales a los ya establecidos en los estatutos partidistas”.

Fuente: Crónica